Trocitos de Carne en Salsa de Mantequilla de Ajo con Crema de Parmesano – ¡Una Cena Irresistible!

¿Buscas una receta cremosa, elegante y que sea ideal para sorprender en una cena especial? Estos trocitos de carne en salsa de mantequilla de ajo con crema de parmesano son exactamente lo que necesitas. Es un plato reconfortante, sabroso y perfecto para acompañar con arroz, puré de papas o pasta. Lo mejor de todo es que se prepara en una sola sartén y en menos de 30 minutos.

El ajo y la mantequilla se combinan para formar una base aromática, mientras que la crema y el queso parmesano elevan el sabor a otro nivel. Esta receta combina la jugosidad de la carne con una salsa rica, cremosa y con un toque de queso, ideal para los amantes de los sabores intensos y la comida casera bien hecha.

Ingredientes

Para preparar esta receta gourmet y casera, necesitas:

  • 500 g de trozos de carne de res (puedes usar solomillo, lomo o carne para saltear)
  • 4 cucharadas de mantequilla
  • 4 dientes de ajo picados finamente
  • Sal y pimienta al gusto
  • 1 taza de crema de leche (nata para cocinar)
  • 1/2 taza de queso parmesano rallado
  • Perejil fresco picado (opcional para decorar)

Consejo: Usa queso parmesano de buena calidad y carne bien magra para mejores resultados.

Instrucciones paso a paso

Paso 1: Dorar la carne

En una sartén grande, derrite 2 cucharadas de mantequilla a fuego medio-alto. Agrega los trozos de carne de res ya cortados y sazónalos con sal y pimienta. Cocina durante unos minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que estén bien dorados por todos lados. Esto ayudará a sellar los jugos y aportar sabor. Una vez listos, retíralos de la sartén y resérvalos.

Paso 2: Preparar la base de ajo

Sin limpiar la sartén (¡ahí está todo el sabor!), añade las 2 cucharadas restantes de mantequilla. Incorpora el ajo picado y saltéalo por unos 30 segundos hasta que esté fragante, pero sin que llegue a quemarse.

Paso 3: Hacer la salsa cremosa

Vierte la taza de crema de leche en la sartén. Baja un poco el fuego y revuelve para integrar bien con el ajo y la mantequilla. Añade el queso parmesano rallado y mezcla constantemente hasta que se derrita y la salsa comience a espesar ligeramente.

Paso 4: Integrar la carne

Regresa los trozos de carne dorados a la sartén. Cocina todo junto por 3 a 5 minutos más para que la carne absorba el sabor de la salsa y se mantenga jugosa. Si la salsa está demasiado espesa, puedes añadir un chorrito de leche o caldo para aligerarla.

Paso 5: Servir con estilo

Espolvorea perejil fresco picado por encima justo antes de servir para darle un toque de color y frescura. Puedes acompañar este plato con arroz blanco, puré de papas, fideos al huevo o incluso pan crujiente para aprovechar cada gota de la salsa.

Consejos para un resultado perfecto

  • Usa carne de buena calidad: cortes como lomo, solomillo o filete delgado son ideales para cocinar rápidamente sin perder jugosidad.
  • No sobrecocines el ajo: solo saltéalo hasta que esté dorado claro. Quemarlo arruinaría el sabor de la salsa.
  • Ajusta la consistencia de la salsa: si está muy espesa, agrega un poco más de crema o leche. Si está muy líquida, deja reducir un par de minutos extra.
  • Puedes añadir champiñones o espinaca si deseas enriquecer el plato con vegetales.

Variaciones

  • ¿Te gusta el picante? Añade una pizca de hojuelas de chile o pimienta cayena a la salsa.
  • Puedes sustituir el parmesano por otro queso duro como grana padano o incluso pecorino.
  • Si prefieres una opción con pollo, esta receta también funciona perfectamente con pechuga en cubos.

¿Con qué acompañar estos trocitos de carne en salsa?

  • Puré de papas cremoso: perfecto para absorber la salsa.
  • Arroz blanco o arroz con mantequilla y ajo: simple y delicioso.
  • Pasta corta como penne o fusilli, para una versión similar a una pasta Alfredo con carne.
  • Pan casero o pan de ajo para mojar en la salsa.

Conclusión

Esta receta de trocitos de carne en salsa de mantequilla de ajo con crema de parmesano es todo lo que necesitas para disfrutar de una comida elegante, rica y fácil de hacer. En tan solo unos minutos tendrás en tu mesa un platillo digno de restaurante que encantará a todos.

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